El estrangulador de Boston

Entre junio de 1962 y enero de 1964 tuvieron lugar en Boston 13 asesinatos en serie que conmocionaron a la capital del estado de Massachusetts y a un país entero.
La confesión de un hombre, al que todos consideraban una persona amable y perfectamente corriente, era lo único que tenía la policía para dar con el culpable.
Durante 50 años, la controversia sobre la autoría de los crímenes acompañó a este caso, hasta que en 2013, los análisis de ADN hicieron posible resolver el crimen.
El asesino llamaba a la puerta de las mujeres que estaban solas, conseguía que estas le invitasen a entrar y las agredía sexualmente para acto seguido estrangularlas hasta la muerte.
Los cadáveres eran hallados en posturas grotescas y todos compartían un elemento común: tenían un gran lazo alrededor del cuello, formado por medias, cinturones u otras prendas femeninas.
Las cinco primeras víctimas fueron mujeres de edad avanzada, que habían sido atacadas sexualmente pero sin violación pero las seis siguientes eran jóvenes atractivas que sí fueron violadas.
Las autoridades investigaron a casi 5.000 individuos con conductas sexuales peligrosas e interrogaron a más de 400 sospechosos, pero solo encontraron indicios claros en uno de ellos: Albert DeSalvo.
DeSalvo había sido arrestado el 6 de noviembre de 1964 por haber violado a múltiples mujeres y se le conocía como “el hombre de verde”, ya que vestía pantalones de trabajo de ese color.
Albert había crecido en un ambiente violento, o sea, su padre, alcohólico, maltrataba a su esposa e hijos y también les obligaba a presenciar todo tipo de abusos y cuando acabó el colegio, se alistó en el ejército y fue destinado a Alemania, donde conoció a su esposa, con la que tuvo dos hijos.
DeSalvo sentía que su mujer le despreciaba, por lo que se hizo pasar por un cazatalentos de una agencia de modelos con el objetivo claro de acercarse a jóvenes estudiantes.
Fue arrestado por allanamiento y después de salir en libertad comenzaron los asesinatos del estrangulador y en el momento de su detención como “el hombre de verde”, tenía 29 años y era considerado un hombre familiar y apacible.

Detención de Albert DeSalvo
Albert DeSalvo confesó a su abogado ser el estrangulador de Boston donde admitió haber cometido otros dos asesinatos aún no conocidos, o sea, las autoridades le interrogaron durante meses para calibrar la veracidad de su testimonio.
En sus declaraciones describió hechos y detalles de los crímenes que no se habían hecho públicos y que sólo el estrangulador y la policía podían saber, aunque cometió algunos errores e imprecisiones que provocaba dudas a los investigadores.
No había ninguna prueba física ni testigos oculares que avalaran el testimonio de DeSalvo, que nunca supo dar un motivo por el que cometió los crímenes.
Por otra parte, su perfil psicológico no acababa de convencer a los expertos tanto por su extremado narcisismo y porque carecía del carácter sádico que demostraban los crímenes del estrangulador.
Además, las diferencias entre las cinco primeras víctimas, ancianas y sin consumar la violación, y las seis restantes, jóvenes y con un componente sexual, hacían pensar en varios asesinos o, al menos, en la existencia de un imitador.

Ocho de las supuestas víctimas del «estrangulador de Boston«
El 9 de enero de 1967 comenzó el juicio contra Albert DeSalvo por los cargos de robo a mano armada y atentado contra el pudor donde su abogado había llegado a un acuerdo para que sus confesiones como autor de los asesinatos no se utilizaran más que para probar que sufría un trastorno psiquiátrico y lograr así que fuera declarado no culpable por enajenación mental.
Su estrategia funcionó a medias, pues le salvó de la silla eléctrica, pero fue encontrado culpable y sentenciado a cadena perpetua, o sea, DeSalvo fue recluido en el Hospital Psiquiátrico de Bridgewater, de donde se fugó tras permanecer tan sólo un mes.
Se entregó 38 horas más tarde, alegando que sólo lo había hecho para llamar la atención y explicó que había confesado sus crímenes para recibir ayuda por su enfermedad mental, pero que nadie se la había prestado.
Fue trasladado a la prisión de máxima seguridad de Walpole, donde fue asesinado, supuestamente por otro recluso el 25 de noviembre de 1973.
La opinión pública siempre mantuvo dudas sobre quien fue realmente el verdadero estrangulador de Boston pues en 2001 la abogada de la familia DeSalvo, junto con varios parientes de Mary Sullivan, la última víctima, reabrieron el caso para intentar aclarar el asunto.
Se exhumó el cuerpo de la joven y se encontró en él fluido seminal, que se comparó con el ADN extraído de objetos personales de DeSalvo donde las pruebas resultaron negativas.
Sin embargo, en 2013 se realizó un segundo examen genético a partir de semen encontrado junto al cadáver. Esta vez se desenterró al propio Albert DeSalvo y, por fin, se despejaron las dudas: el ADN encontrado junto a los restos mortales de Mary Sullivan coincidía con el de DeSalvo.
Tras esta evidencia científica, se puede concluir que DeSalvo es el asesino de Mary Sullivan. ¿Pero fueron los otros crímenes obra suya?
Fuente: https://citv.es/fichados/estrangulador-boston-adn-no-miente/
Deja una respuesta