El Juego Real de Ur, uno de los más antiguos juegos de tablero de la historia
De hecho, no sólo el juego sino también el llamado Estandarte, una especie de caja de madera cuyos paneles están elaborados con esa bella técnica que es la taracea (similar a la del mosaico pero en vez de usar sólo teselas se utilizan también marfil, maderas y metales diversos, conchas marinas, nácar, coral…) y muestran escenas militares y domésticas. Su interés especial radica en que, como indica su nombre, es de época sumeria y está datado en torno al siglo XXVI a.C.
Lo encontró en 1927 el famoso arqueólogo británico Sir Charles Leonard Wooley, cuando dirigía una campaña de excavaciones en la Necrópolis de Ur, al sur de la actual Bagdad (Irak). En ese lugar desenterró dieciséis sepulturas (aunque el total de las localizadas superaba los dos millares y medio) que bautizó con el nombre de Tumbas Reales de Ur, construidas en ladrillo y de techo abovedado, todas correspondientes al período Dinástico Arcaico y con sus difuntos ocupantes acompañados de servidumbre sacrificada ad hoc, además de los correspondientes ajuares funerarios.
La de Puabi no fue la única tumba con ocupante identificado; también la de Meskalamdug, del que no está claro si era lugal (rey) o únicamente ensi (gobernante, mitad administrador, mitad sacerdote, sin sangre azul) o la de A-kala-dug. En cualquier caso, las demás también proporcionaron una buena colección de objetos, como el casco de oro del primero. En el caso del Estandarte, hallado en una donde yacían setenta y cuatro cuerpos, pero hubo otras y de dos de ellas se extrajeron sendos tableros con fichas del Juego Real de Ur, a los que se calcula una antigüedad de unos cuatro mil quinientos años.
El Estandarte Real de Ur
Pese a ello, no se trata del juego de mesa más añejo conocido porque el senet egipcio es casi un milenio anterior y el oware, un tipo de mancala (juego de tablero con fichas) originario del África occidental, también es anterior. Sin embargo, los tres presentan similitudes en su desarrollo, guardando parecido con el parchís: el objetivo es sacar las fichas del tablero antes que el rival siguiendo unas casillas, por eso se parece también al backgammon, aunque se cree que éste deriva más bien de la tábula romana.
Algunos opinan que el senet, pese a ser más antiguo que el asseb, que es como los egipcios llamaban al juego de Ur, sería en realidad una versión de éste; mientras no se encuentre más información al respecto es imposible saberlo. Lo que sí resulta obvio es el parecido, que conocemos pese a que no se conservan las reglas de ninguno de los dos.
Fuente: https://www.labrujulaverde.com/
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