El misterioso Faro de Gibraltar en Toronto

John Paul Rademuller, el primer farero que trabajó en el faro, se sabía que fabricaba su propia cerveza, dado su origen germano y muchos soldados de Fort York cruzaban el puerto, fuera de sus horas de trabajo y conseguir algo de cerveza gracias a Rademuller. Lamentablemente, su cerveza dio origen a un extraño suceso.
El farero fue asesinado el 2 de enero de 1815 por lo que se cree que aquellos que lo mataron fueron tres soldados ebrios que habían viajado de Fort York para obtener cerveza.
La leyenda cuenta que Rademuller se negó a servirles la cerveza, con lo que lo golpearon y lo llevaron hasta la parte superior del faro para más tarde el ser arrojado al vacío, cortaron su cuerpo en pedazos y enterraron sus restos en varios lugares a lo largo de la isla.
Ochenta años más tarde, George Durnan, el farero en ese momento, llevó a cabo el descubrimiento en las arenas de la isla los restos de una mandíbula humana.
Aunque no se ha podido demostrar si esta mandíbula pertenecía al farero Rademuller, ya que este lugar era un antiguo cementerio destinado para los aborígenes.
Algunas personas que se han acercado a las inmediaciones del faro cuentan que, en ocasiones, ven a un hombre merodear en torno al faro, como si va a buscar algo.
Nadie ha hablado nunca con él, pues, cuando intentan acercarse, resulta el que desaparece. Se cree que es Rademuller, que cada noche, baja a la playa a buscar sus propios restos.
La noche que suele aparecer se forma una densa niebla, y entre la maleza, se oyen quejidos lastimeros pues según cuentan, del faro se escuchan golpes y ruidos extraños.
Algunos fareros que han trabajado aquí tuvieron que abandonar su trabajo, ya que oían en esas noches de niebla una gran cantidad de pasos subiendo las escaleras, como si arrastraran algo muy pesado.
Fuente: https://www.flipada.com/7-faros-costeros-con-siniestras-leyendas/