La Dinastía de los Antoninos

La dinastía Antonina fue la casa reinante en el Imperio romano de 96 a 192, lo que la convierte en la dinastía mas larga y también se conoce a sus cinco primeros miembros por el nombre de los Cinco emperadores buenos.
Se debe el nombre de la Dinastía Antoninos, no precisamente por su primer emperador de ella, sino por el cuarto en el orden dinástico, o sea Antonino Pío, cuya denominación la causa el excelente criterio en considerar a este emperador, el mejor de toda la dinastía, por razón en el buen gobierno del Imperio Romano, su honradez como aportaciones a la mejor época de Roma en todos los sentidos, económicamente, socialmente y políticamente.
La Dinastía Antonina, proporcionó gobiernos estables, y quizás de las épocas más duraderas en cuanto a la paz y se caracteriza a la Dinastía Antonina, por ser todos sus emperadores elegidos, no por sucesión paterna, sino por elección de los hijos adoptivos de cada emperador.
La Dinastía Antonina La característica primordial del Imperio Romano durante la Dinastía Antonina era precisamente, su expansionismo, como la imposición tanto de sus leyes, costumbre e idiomas por todo el territorio dentro de sus fronteras llevadas a cabo por los siguientes emperadores.
Nerva (96-98)

Marcus Cocceius Nerva Caesar Augustus, nació el 8 de noviembre del año 27 o 31 d.C, en la ciudad de Narni pues tras el asesinato de Domiciano, antecesor de Nerva en el Imperio Romano, la situación de Roma era poco menos que caótica.
Como consecuencia de ello, el Emperador Nerva, tuvo que deshacer todos los malos asuntos de su antecesor, restableciendo las buenas relaciones con el Senado, implantó la sucesión imperial por adopción en vez de sucesión hereditaria, cerró los procesos que estaban en marcha, devolviendo los bienes confiscados a sus dueños, hizo volver a los exiliados hebreos y otros por cuestiones políticas, castigando a los delatores.
Nerva en su corto reinado, mejoró la situación de los agricultores pobres, afianzando las maltrechas finanzas, dilapidadas por su anterior emperador pero tuvo que soportar las veleidades de los siempre levantiscos pretorianos.
Debido a ello, aguardando cualquier ocasión en anteponer sus intereses, por lo cual estos descontentos con Nerva, lo sitiaron en su propio palacio, degollando a algunos consejeros del emperador, exigiendo la entrega de los asesinos del emperador Domiciano, a lo que Nerva ofreció su propia cabeza, desistiendo los pretorianos de sus propósitos, acto seguido Nerva presentó su dimisión al Senado, el cual no la aceptó.
Nerva, siempre consultando al Senado, presentó como sucesor suyo a Trajano, antes que los pretorianos impusieran sus propios criterios en este sentido, ya que Nerva presentía ya su propio fin, que no tardó en llegar por causa de múltiples dolencias y murió en los Jardines de Salustio, el 27 de enero del año 44 o 45.
Trajano (98-117)

Marco Ulpio Trajano nació en Itálica en el 53 y falleció en Selinonte en el 117 miembro de una familia de la pujante aristocracia de la Bética, desarrolló una brillante carrera militar a lo largo de los reinados de Domiciano y Nerva.
En el año 97, Nerva lo adoptó y lo asoció a la sucesión imperial, con lo que se inició una costumbre que se mantendría durante la época de los Antoninos, por la cual, el emperador designaba un sucesor, a quien adoptaba, entre los aspirantes más cualificados.
La figura de Trajano fue considerada por la historiografía romana como la del Optimus Princeps, y su actitud de respeto por el Senado y por la tradición, así como su eficaz gestión de gobierno, le valieron la admiración de sus contemporáneos.
Mejoró la Administración imperial, realizó numerosas obras públicas y, consciente del declinar demográfico del imperio, instauró diversas iniciativas tendentes a paliar sus efectos, protegiendo a las familias numerosas y a los huérfanos.
Sin embargo, es recordado, sobre todo, por sus campañas militares, que llevaron las fronteras del Imperio Romano hasta su punto de máxima expansión.
Tras dos intensas campañas, la primera entre el 101 y el 102 y la segunda entre el 105 y el 107, las legiones consiguieron quebrar la resistencia del reino dacio del rey Decébalo.
Ocupada Dacia, que fue repoblada por colonos, Trajano llevó a cabo una importante reorganización del limes antes de pasar a la ofensiva contra el enemigo tradicional de Roma en Oriente, los partos.
En el 113, un nutridísimo ejército romano inició el ataque, que lo llevaría a ocupar toda la Mesopotamia y conquistar ciudades como Babilonia y Ctesifonte, para llevar las armas de Roma hasta el golfo Pérsico.
Estos límites territoriales resultaron más difíciles de conservar que de conquistar, hasta el punto de que una rebelión judía y el continuo hostigamiento por parte de los partos de Cosroes obligaron a Trajano a evacuar el sur de Mesopotamia. Enfermo, el emperador murió durante su regreso a Roma.
Adriano (117-138)

Publio Elio Adriano, nacido en Itálica (Sevilla) o bien en Roma, el 24 de enero del año 76 d.C (no se sabe con certeza), tercer emperador de la dinastía de los Antoninos.
Adriano se preocupó por el buen funcionamiento de las fronteras, reforzando estas, y como constructor del famoso “Muro de Adriano” erigido en Britania, a fin de preservarse los romanos de los ataques de las tribus britanas, caledonios y pictos principalmente.
Llevó a cabo una buena organización administrativa, dedicándose más al gobierno interior del Imperio Romano, que no su expansionismo militar a cuya misión principal encomendó a este en el mantenimiento de las guarniciones fronterizas, cosa que no acabó de gustar al estamento del ejército que en más de una ocasión realizaron complots pero todos ellos fueron sofocados y desmantelados.
Realizó modificaciones en la dinámica del ejército en la creación de nuevos campamentos, vías de comunicación entre las diferentes guarniciones, como el reclutamiento entre los habitantes de cada región provincial, a los cuales tras su licenciamiento se les concedía la ciudadanía romana.
Adriano fue un empedernido viajante, visitando, La Galia, Egipto, Germania, Britania, Hispania, y Grecia su siempre gran admiradora, sobre todo tenía la obsesión de construir templos y edificios, con que mejorar el Imperio Romano, prefiriendo siempre el estilo griego en vez del romano.
Sin duda su obra maestra fue la villa de Tivoli, a la cual no le faltó de nada, templos, bibliotecas, museos un hipódromo; tan abundantes fueron sus edificios, que las sucesivas invasiones, a través de los siglos, aun expoliando todas sus riquezas sistemáticamente, estas parecían inacabables.
Adriano erigió un mausoleo para si mismo al otro lado del Tíber uniéndolo con un puente llamado Elio, actualmente se llama Castel de Sant’Ángelo, puesto que viéndose enfermo y próxima su muerte, preparó a su amigo Lucio Vero, que adoptó, para la sucesión del trono de Roma, pero este murió al poco tiempo.
Los último días de Adriano fueron de intenso sufrimiento, con abundantes hemorragias nasales. Al terminarse las obras de Castel Sant’Ángelo, vino a visitarle el filósofo estoico Eufrates, hablando con Adriano de la inutilidad de la vida, pidiendo al emperador permiso para suicidarse, el cual se lo concedió, bebiendo cicuta, pidiendo Adriano para si mismo dicho veneno, pero nadie quiso dársela.
Adriano ordenó a su médico la pócima, y este para no desobedecerlo, se quitó la vida, desesperado por el sufrimiento Adriano rogó a un criado le proporcionase una espada o puñal, pero el criado asustado, huyó.
Finalmente Adriano murió el 10 de julio en su villa de Baiae a los 62 años por insuficiencia cardiaca y al principio lo enterraron en Puteoli pero después en los Jardines de Domicia.
Una vez incinerado volvieron a cambiar sus restos al mausoleo que Adriano se construyó para si mismo (Sant’Ángelo), pero una vez más fue trasladado al templo del Campo de Marte, por su sucesor Antonino Pío.
Antonio Pio (138-161)

Tito Fulvio Boyonio Arrio Aurelio Antonino Pío, nacido el 19 de septiembre del año 86 d.C, en Lanuvium, casado con Faustina la Mayor, una mujer virtuosa dedicada toda su vida al socorro de los más desvalidos y pobres de Roma.
El senado concedió al emperador el título de Pío, por su honradez, humildad, generoso con todo el mundo, de un carácter afable y sobre todo por haber renunciado a cualquier otra prebenda o cargo que no fuese el suyo propio de emperador.
Antonino Pío se cuidó muy estrictamente del control de la burocracia, procurando el bienestar de la población, con innumerables donaciones pecuniarias hacia los romanos, sobre todo su dedicación en la organización del ejército pagando todos los gastos con su fortuna particular.
Durante el reinado de Antonino Pío, Roma vivió sin grandes sobresaltos pues sólo tuvo que actuar en una revuelta de los campesinos de Egipto, haciendo peligrar la importación de sus extensos cereales a la ciudad de Roma y reforzar las fronteras del Imperio Romano como las de Britania o incluso las confines de todo Oriente.
Antonino Pío, mejoró más las leyes instituidas por Adriano, como sería el derecho concedido, tan solo al marido, en castigar a la esposa infiel. Así mismo con respecto a los esclavos, decretó que únicamente un magistrado podía ejercer la potestad de juzgar y castigar al esclavo, prohibiendo de igual manera que el amo pudiese vender al esclavo, a centros de prostitución o a las escuelas de gladiadores, para sus combates en la arena del circo, por lo que dejó de ser un mero y caprichoso objeto, pasando a convertirse en una persona.
Tan solo se le conocen dos intentos de asesinato contra el reinado de Antonino Pío, debidos sobre todo a su debilidad, por la cual, algunos se vieron envalentonados en el intento de suprimirlo.
Antonino viendo la aproximación de su fin, tras breve enfermedad, se hizo trasladar a su aposento de Etruria, haciéndose acompañar por la estatua de oro de la Victoria junto por su cuarto hijo, y dando la contraseña al tribuno de guardia “Aequanimitas”, como símbolo de su comportamiento en la vida, expirando seguidamente, era el día 7 de marzo del año 161 d.C.
Como último homenaje hacia Antonino Pío, el senado grabó una estela funeraria, en el templo que Antonino construyó en memoria de su esposa, redactado así: “Al dios Antonino y a la diosa Faustina”.
Marco Aurelio (161-180)

Marco Aurelio Antonino Augusto (apodado “El Sabio”), nació en Roma el 26 de abril del año 121 d.C, hijo de Marco Annio Vero y Domicia Lucilla, hijo adoptivo de su predecesor Antonino Pío.
Marco Aurelio, provenía de la familia Aurelia, con antepasados nacidos en tierras hispanas pues siempre se mostró orgulloso de su antigua familia como de la presente, pregonando siempre del gran aprecio familiar existente entre todos sus miembros.
Marco Aurelio quedó huérfano muy pronto y como era un gran aficionado a la filosofía llegó a escribir libros en griego y latín, considerado como el máximo exponente de la filosofía estoica, y en ámbito militar era muy apreciado por sus soldados.
Marco Aurelio, una vez investido bajo el cetro del Imperio Romano, pudo tener las manos libres para su cometido de gobierno, existió buena conexión entre él y el Senado, pero tuvo que rodearse de múltiples asesores, ya que no dominaba del todo las cuestiones financieras y burocráticas.
Marco Aurelio, sin embargo tuvo pronto necesidad en desplegar sus buenas aptitudes militares, ya que el empuje de las tribus bárbaras en las fronteras del Imperio Romano, eran más que evidentes, sobre todo cuando Lucio Vero estaba al frente del ejército en las fronteras o “limes” del imperio.
Sin embargo, cuando se produjo la muerte de Lucio Vero es cuando entra en acción Marco Aurelio, que tuvo necesidad de emplear a fondo sus conocimientos militares.
La propagación de la peste, que tan solo en Roma mató a 200.000 personas, hasta el mismo Marco Aurelio la sufrió, superándola a pesar de que su salud nunca fue buena.
Las tribus germánicas empezaron a invadir Hungría y Rumania, por lo que Marco Aurelio se puso al frente de sus legiones para combatirlos y durante seis años Marco Aurelio se enfrentó y venció a cuados, longobardos, marcomanos y sármatas.
Tuvo Marco Aurelio necesidad de combatir contra su general Avidio Casio destacado en Egipto, que al sublevarse se auto proclamó Emperador de Roma pero cuando se dirigía a su encuentro de fue asesinado por uno de sus propios oficiales, cosa que lamentó Marco Aurelio, ya que su intención era perdonarle su rebeldía.
Las legiones de Marco, aun tuvieron que soportar, otras acometidas de los germanos, que continuamente se levantaban contra el poder de Roma, obligando a Marco Aurelio a luchar una y otra vez, pacificando las fronteras amenazadas del Imperio Romano.
Marco Aurelio en ocasión de una nueva guerra contra los germanos, y acompañado de su hijo Cómodo, en la ciudad de Viena a causa de su mala salud cayó enfermo de gravedad, encomendó a su hijo Cómodo comandar las legiones hasta los confines de las fronteras de Roma hacia el Elba, y acostándose en su lecho, se cubrió con la sábana, esperando la llegada de la muerte el 17 de marzo del año 180 d.C, en Vindobona (Viena).
Tras las guerras que Roma hubo de soportar, Marco Aurelio, tuvo que reponer la maltrecha hacienda del estado, devaluando la moneda, y subastando ornamentos imperiales, joyas y vajillas del palacio, a fin de financiar la segunda guerra contra los germanos y tuvo gran preocupación en acondicionar toda la red de vías del imperio, para así tener amplia movilidad de sus ejércitos.
Cómodo (177-192)

Cómodo fue emperador de Roma entre los años 177 y 192 pues los tres primeros años gobernó junto a su padre Marco Aurelio y desde el año 180 se hizo cargo personalmente del gobierno poniendo fin a la dinastía Antonina que se caracterizó por ser la primera en la cual el gobernante elige a su propio sucesor.
Pasó a la historia no por sus logros o aportes sino más bien por su perfil de déspota y por la consideración de haber sido uno de los peores gobernantes que tuvo el Imperio Romano.
Su decadencia empieza cuando fallece su padre quien lo había sabido proteger pero a partir de ese momento cambia rotundamente su carácter y pasa a creerse único, incluso esa manera de ser es la que lo llevará a la muerte por estrangulamiento en el 192.
Cómodo nació como Lucio Aurelio Cómodo Antonino, el 31 de agosto del año 161, en Lanuvium, una localidad cercana a la ciudad de Roma pues su padre Marco Aurelio era el emperador en ejercicio.
En ese mismo momento, se convirtió en su heredero natural y en el año 166 le concederían el título de César como a todos los herederos. y su madre fue Faustina la menor.
Por la temprana muerte de los hermanos de Cómodo, Marco Aurelio, decidió cuidarlo sobremanera y además proveerlo de una educación intelectual sobretodo en lo referente a la formación militar.
En el 172 se le otorga el título militar de Germanicus por lo cual se supone que tuvo activa participación en las Guerras Marcomanas y en el año 175 ingresó al Colegio de los Pontífices que marcaría su ingreso formal a la política.
Dos años después, en el año 177, tomaría las riendas del gobierno y compartiría decisiones con su padre pero a partir del año 180 y por el lapso de doce años asumirá en solitario la responsabilidad del gobierno.
Su reinado se destacó por no presentar contiendas bélicas de envergadura, como sí ocurrió durante el gobierno de su padre, en tanto, los conflictos se trasladaron a la política interna que fue muy problemática.
Empezó a reinar con tan solo 19 años de edad lo que contribuyó al desencadenamiento de más problemas internas como las referentes a una serie de conspiraciones cercanas que tuvo que padecer.
Otra cuestión insoslayable de su reinado es el endiosamiento que le imprimió a su imagen, levantando estatuas suyas por todo el imperio y el abrupto cambio de carácter que experimentó tras la muerte de su padre y que lo tornaron en un individuo que se creía dios.
Le gustaba luchar con gladiadores desarmados a los cuales asesinaba, y que incluso hasta gustaba de matar a los discapacitados que abundaban en las calles de Roma, e incluso, también tenía una inclinación asesina para con los animales, le gustaba torturar a sus esclavos y era un afecto organizador de orgías.
Su gobierno terminó con una época del imperio que había sido muy prospera en todo sentido y lo terminó sumiendo en una grave crisis que llevó años de restablecer a la normalidad.
El 31 de diciembre del año 192 muere estrangulado, a la joven edad de 31 años, por un esclavo liberado, luego que el veneno que le habían suministrado no había surtido el efecto pretendido por parte de Marcia quien era su concubina y estaba confabulada para matarlo.
Fuente: https://www.apunteshistoria.com/historico/v-marco-aurelio/