La leyenda de la Casa de la Cruz de Palo

Este relato tiene lugar en tiempos de Felipe II cuando Madrid se convirtió en la capital del reino donde en una de las viviendas vivía un matrimonio musulmán.
El chico musulmán se había enamorado de una joven árabe y siempre que podían la pareja disfrutaba de una relación estable hasta que entonces entre ellos se interpuso un apuesto cristiano que también se enamoró de la joven.
Los amantes furtivos aprovechaban la ausencia del marido para dar rienda suelta a sus pasiones, unos encuentros que se repetían cada vez más hasta que en una ocasión el amante no se presentó a su encuentro clandestino.
A la chica le extrañó pero no le dio importancia, pero entonces comenzó a preocuparse cuando, fueron pasando los días y nunca más volvió a tener noticia de su amado y ello le provocó un inexplicable vacío que la sumió en una profunda tristeza.
Ella sufrió en silencio dicha ausencia, sin sospechar lo que averiguaría tiempo más tarde, o sea, cuando su marido falleció al realizar una reforma en la casa donde al subir al desván descubrió horrorizada el cadáver de su amante cristiano emparedado donde habían llevado en secreto su amor.
Al parecer el amante había sido sorprendido en alguna de sus citas secretas pues el furioso esposo aprovechó la ocasión y no tuvo piedad ni clemencia de su enemigo.
Desde ese instante, la mujer decidió convertirse al cristianismo y mandó colocar en el tejado una cruz de palo, para que todos fuesen testigos de su cambio de fe.
De hecho, hay quien todavía dice que en las noches de luna llena se puede ver vagando por la Calle del Sacramento al espíritu del malogrado cristiano.
Fuente: http://www.secretosdemadrid.es/la-leyenda-de-la-casa-de-la-cruz-de-palo/