Rebecca Schaeffer

Rebecca Lucile Schaeffer (Eugene, Oregón; 6 de noviembre de 1967-Los Ángeles, California; 18 de julio de 1989 fue una actriz estadounidense, conocida por su papel en la comedia de situación My Sister Sam.
Fue acosada y luego asesinada por Robert John Bardo, un fanático obsesivo que la estuvo acechando durante tres años, lo que instigó la creación del pasaje de las leyes anti-acoso en California.
El 18 de julio de 1989, Schaeffer fue asesinada por Robert John Bardo quien después de su obsesión anterior, la pacifista Samantha Smith, muriera en un accidente de avión.
Bardo le escribió varias cartas a Schaeffer, una de las cuales fue respondida por un empleado del servicio de fanáticos de Schaeffer.
En 1987, Bardo viajó a Los Ángeles en un intento de ver a Schaeffer en el set de My Sister Sam, pero no pudo conseguirlo gracias a la intervenciín de la seguridad de la CBS.

La vivienda donde residía Rebecca Schaeffer
Enojado, regresó un mes más tarde armado con un cuchillo, pero en esta nueva ocasión tampoco lo consiguió gracias a la intervención de los guardias de seguridad los miembros de seguridad.
Entonces, Bardo regresó a su ciudad natal, Tucson, y se olvidó de Schaeffer por un tiempo, pero ahora empezó a ocuparse de las cantantes pop Madonna, Debbie Gibson y Tiffany.
En 1989, después de ver la película de Schaeffer Scenes from the Class Struggle in Beverly Hills, en la que ésta aparecía acostada con un actor, Bardo se enfureció y decidió que Schaeffer debía ser castigada por ello.
Después de haber leído que el acosador de Theresa Saldana, Arthur Richard Jackson, había obtenido al final la dirección de Saldana a través de un investigador privado, Bardo fue a una agencia de detectives de Tucson y les pagó 250 dólares para obtener su domicilio a través de los registros del DMV (Departamento de Vehículos Motorizados de California.

Rebecca Schaeffer
Además de conseguir la dirección de su domicilio su hermano le ayudó a conseguir un arma de fuego y tras ello Bardo viajó a Los Ángeles por tercera vez y, después de localizar el apartamento de Schaeffer, vagó por el barrio preguntando a los transeúntes si esa era su residencia real.
Confiado en que la dirección era correcta, tocó el timbre Schaeffer abrió la puerta y Bardo le mostró la carta y el autógrafo que previamente ella le había enviado y, después de una breve conversación, Schaeffer le pidió a Bardo no volver a su casa y este se marchó.
Luego se dirigió a un restaurante, desayunó y una hora más tarde, Bardo regresó al apartamento de Schaeffer por segunda vez y ésta le abrió la puerta de nuevo con «una mirada fría en la cara», dijo Bardo más tarde.
Bardo sacó un arma de una bolsa de papel marrón y realizó un único disparo a quemarropa en el pecho en la puerta de su edificio y entonces Schaeffer gritó, se derrumbó en su puerta y Bardo huyó.
Un vecino llamó a los paramédicos, que llegaron para transportarla al Cedars-Sinai Medical Center pero nada se pudo hacer por su vida pues Schaeffer fue declarada muerta treinta minutos después de su llegada.
Al día siguiente, Bardo fue arrestado en Tucson, después de que varios conductores vieron a un hombre que se lanzó al tráfico en la Interestatal 10 e inmediatamente confesó el asesinato.

Robert Bardo durante el juicio
Bardo fue juzgado por la fiscal Marcia Clark y fue declarado culpable de homicidio calificado en un juicio sin jurado, y fue condenado a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.
Tras el asesinato de Schaeffer y del ataque a Saldana, las leyes de California concernientes a la cesión de toda la información personal a través de la DMV fueron cambiadas de forma drástica.
La ley de Protección a la Privacidad de los Conductores fue promulgada en 1994, impidiendo a la DMV poder entregar direcciones privadas pero el efecto de la ley ha sido reducido posteriormente debido a los servicios en línea de búsqueda de direcciones.
Fuente: https://es.wikipedia.org/wiki/Rebecca_Schaeffer