La historia del Donuts

A mediados del siglo XIX, los holandeses ya hacían unas tortas de masa fritas en grasa de cerdo que llamaban olykoeks, pero dado que estas no se cocinaban bien en el interior, se les incorporaba ingredientes como nueces y frutas, de tal forma podían permanecer sin cocción.
Un día de 1847, a bordo de un barco y cansado de tener centros de masa crudos, el capitán Hansen Gregory, a quien le encantaban las tortas de masa de su madre, pero aborrecía los centros de fruta y nueces, encontró una medida que resolvería este problema.
Pidió al cocinero que se perforara un agujero en el centro de la torta con la tapa de un pimentero aumentando así la superficie de contacto con el aceite caliente y dejando como resultado una torta en forma de rosquilla, completamente cocida.
No obstante, el donut podía haberse limitado a ser uno más entre los numerosos bollos ofertados en las pastelerías neoyorkinas de no haber sido por la feliz ocurrencia de un joven médico del ejército Morgan Pett.
En su primer día en la base militar a la que le habían destinado durante la Primera Guerra Mundial se personó con ocho docenas de ellos para alegrar la mañana a los soldados heridos en combate a los que iba a tratar.
Una iniciativa que fue muy bien acogida por los soldados, pero también por sus superiores y comenzó una campaña recaudatoria en la que se implicó el Ejército de Salvación (Salvation Army).
La idea cruzó el charco con las voluntarias de esta organización de “apoyo espiritual” que prestaban su ayuda en territorio francés y que pronto fueron bautizadas como las doughnuts dollies, encargadas de repartir donuts en las trincheras para que los muchachos se sintiesen como en casa.
Al finalizar la guerra, los soldados llevaron de vuelta a casa su afición por los donuts y hacia 1920 Adolph Levitt inventó entonces la primera máquina automática para hacer donuts, en la que los aros de masa circulaban por un canal rebosante de aceite hirviendo y ya fritos ascendían por una rampa móvil hasta caer en una cesta.

El capitán Hanson Gregory, inventor del donuts
En los siguientes años, Levitt amasó una considerable fortuna sirviendo donuts al por mayor por todo el país, lo que consolidó su popularidad y en 1934 durante la Feria Mundial de Chicago los doughnuts fueron pues presentados como “la comida del siglo del progreso” y su automatizado proceso de elaboración como una visión del fantástico futuro que se avecinaba gracias a las modernas máquinas.
El primer Día Nacional del Doughnut, durante el que estos se repartían y vendían con fines solidarios, se celebró en 1938, siendo organizado por el Salvation Army para homenajear a las voluntarias y a los veteranos de guerra, pero también como una iniciativa para ayudar a los menos favorecidos.
En 1950 Vernon Rudolph inventó la Krispy Automatic Ring King Junior Doughnut machine y se trataba de una compacta máquina que asumía todo el proceso: mezclaba los ingredientes, elaboraba la masa, la moldeaba, freía, enfriaba y distribuía los donuts en cajas dando lugar al éxito de la cadena Krispy Kreme.
Por todo ello, en 1997 y con motivo del 60 aniversario de la apertura del primer puesto de Rudolph, la Krispy Automatic Ring King Junior Doughnut machine pasó a formar parte de la exposición del National Museum of American History quedando integrado en la Smithsonian Institution, como uno de los grandes hitos de la tecnología aplicada a la industria alimentaria de EEUU.
Al respecto, David A. Taylor no deja lugar a dudas: “representa un importante capítulo en la cultura americana y en la historia de la industria del siglo XX”.
Fuente: https://www.bbvaopenmind.com/tecnologia/visionarios/donuts-una-historia-redonda-y-a-toda-maquina/