La embrujada posada Battery Carriage

La inquietante historia de la posada, como la mayoría de los lugares del sur, está fuertemente rodeada por la historia de las guerras pues en el caso de Battery Carriage House, la guerra que lo dejó marcado y golpeado con energía sobrenatural fue la Guerra Civil.
La Battery Carriage House (ubicada en 20 South Battery) no solo es uno de los lugares más encantados de Charleston, sino también uno de los hoteles con más historia de la ciudad.
La existencia de la posada comenzó el 7 de Junio de 1843 cuando Samuel Stevens compró la tierra donde se colocarían la fundación de la famosa posada embrujada por $4,500 dólares.
Originalmente la casa se construyó al estilo neoclásico característico de la ciudad y sobre el 1859, casi 16 años después, vendió la propiedad donde estaba la casa a un señor John F. Blacklock y trasladó su propia casa desde 18 Bull Street a su nuevo terreno en 20 South Battery.
Desafortunadamente, poco después de que Blacklock se mudo a la nueva y mejorada 20 South Battery, comenzó la Guerra Civil por lo que Blacklock se vio obligado a abandonar la casa y nunca más la volvió a llamar hogar, o sea, vendió la propiedad en el año de 1870 al coronel yankee Richard Lathers.
Después de la guerra, la economía de Charleston atravesó tiempos difíciles y muchos de los comerciantes del sur perdieron todo pero a pesar de ello Lathers contrató al arquitecto John Henry Devereux pues así le encargó la tarea de renovar 20 South Battery en el estilo del Segundo Imperio que era popular en Nueva York.
Intentando estimular la economía en apuros de Charleston, Lathers frecuentemente invitaba a sus amigos de Nueva York pues entre ellos había políticos y financieros.
A pesar de los esfuerzos de Lathers, las heridas de la Guerra Civil fueron demasiado grandes y los locales no estaban dispuestos a poner su confianza en hombres de negocios del norte, o sea, que eso condujo al estancamiento de la economía de la ciudad.
En el año de 1874, Lather vendió la casa que fue durante años renovada a Andrew Simonds. Simonds era miembro de la familia Calhoun, una de las familias más respetadas y queridas de Carolina del Sur.
La familia Calhoun fue una de las pocas familias de Carolina del Sur capaces de capear la tormenta de la Guerra Civil y continuó aumentando su riqueza.
Simonds, como su familia, tuvo éxito en sus empresas comerciales y lo más notable fue el establecimiento del First National Bank de Carolina del Sur y la Imperial Fertilizer Company. Además de su banco junto a su compañía de fertilizantes.
La familia Simonds vendió la casa en 1912 y a partir de ahí, 20 South Battery se convertiría en el hogar de numerosos ocupantes por lo que uno de los primeros en llamar a la casa su hogar fue la Sociedad para la Conservación de Viviendas Antiguas..
El objetivo de la sociedad contrastaba esfuerzos dirigidos por el coronel Lathers. Lathers intentó traer la cuidad hacia lo moderno, mientras la sociedad trabajó incansablemente para preservar los monumentos históricos de Charleston antes de que desaparecieran.
La Battery Carriage House es un sitio repleto de actividades paranormales, o sea, que las apariciones en la posada en realidad, se remontan a poco después de la Guerra Civil y hoy en día, se dice que hay un gran número de espíritus que deambulan en su interior.
Tanto los huéspedes como los empleados han tenido enfrentamientos con estos espíritus y los disturbios paranormales que ocurren en la posada son tan profundos que las ocurrencias, han convertido a muchos escépticos que se han quedado a pasar la noche durante años.
Algunos de los fantasmas de la posada son criaturas de hábitos que por una razón u otra tienden pues a quedarse en sus áreas designadas dentro de las paredes de la casa y podemos destacar principalmente la presencia de una experiencia sobrenatural en tres habitacionestres.
La primera de ellas es la habitación 3 donde una de las historias más infames sucedió hace tiempo, o sea, cuando una pareja casada decidió pasar la noche en la posada.
Cansados de un largo día, la pareja se fue directamente a la cama, pero poco después el matrimonio se despertó de forma repentina medianoche debido a que sonó el móvil del esposo. Sin embargo, resulta que en realidad el teléfono no sonaba, hacía un ruido fuerte y extraño, además el esposo había apagado su teléfono antes de irse a dormir.
Aparentemente, la pareja también vio un orbe flotando alrededor de la habitación en su primera noche y lo mismo sucedió en su segunda noche pues el esposo afirmó que en esa segunda noche aún había más formas brillantes orbitando por la habitación.
Después de dos noches inquietas, la pareja llamó a un psíquico, que también era un invitado en el Battery Carriage. La pareja le pidió que revisara la habitación y al entrar, sintió la presencia de múltiples espíritus por lo que a petición de la pareja, el psíquico pidió a los espíritus que abandonaran la habitación.
A la mañana siguiente, la pareja se reunió con el psíquico y le informó que los espíritus debían haber así abandonado la habitación, ya que por primera vez en tres noches pudieron dormir profundamente.
El honor de la habitación más siniestra en El battery house está en la habitación 8 pues aquellos que lo han hecho, han contado su noche en la habitación, como uno que continuamente cobra vida en todas sus pesadillas.
Se dice que este fantasma ha inspirado que la gente corra hacia sus autos ya que se escuchan así ruidos extraños, despertando a los que se alojan en esta habitación, de su profundo sueño donde el invitado es saludado por un torso sin cabeza flotante.
En el año de 1993, un escéptico había reservado la habitación 8 y uando le contó a otros que iba a pasar la noche en esa habitación, se le advirtió repetidamente que no lo hiciera pero éste hizo caso omiso a las advertencias, de hecho se rió de ellas.
Esa noche se registró en la posada y entonces el escéptico se despertó por una perturbación cuando vio el torso decapitado, su estado de no creyente cambió repentinamente y entonces decidió así extender la mano para tocar el espíritu pesado. Solo para retraer su mano, al escuchar el gruñido animal que soltó el espíritu.
La mejor oportunidad para ver un fantasma en el Battery House es en la habitación 10 donde podemos encontrar al caballero fantasma y que es conocido por compartir amablemente su habitación con todos y cada uno de los huéspedes.
Lon que han visto la aparición de El Caballero fantasma lo han descrito como una sombra grisácea y por lo general, parece ser de estatura y complexión media, y tiende a caminar por la habitación con bastante estilo.
Al fantasma le gusta la cama y es notorio por sorprender a los huéspedes que lo encuentran de forma pacífica acostado en su cama. No se puede culpar a la gente por tener miedo al encontrar a un extraño en su cama.
No todos los que han pasado la noche en la habitación 10 han tenido sólo experiencias con el caballero fantasma, o sea, algunos han experimentado sucesos bastante extraños en esa misma habitación, como la sensación de un ojo vigilante de una presencia desconocida mirándolos mientras sacan toda la ropa de la maleta.
Al parecer, en una ocasión una mujer estaba tan nerviosa por su estancia en la habitación que pasó toda la noche leyendo la Biblia. Eventualmente se quedó dormida y se despertó a la mañana siguiente con la Biblia aún en las manos.
Hay muchos rumores sobre quiénes fueron los fantasmas, o sea, algunos teorizan que el torso sin cabeza podría haber sido un soldado de la Guerra Civil, que tuvo una muerte brutalmente dolorosa.
En cuanto al fantasma caballero, se cree que probablemente era un estudiante universitario los días en que Battery sirvió como apartamentos para estudiantes y que quizá estaba deprimido y se suicidó en su habitación.
Fuente: https://ghostcitytours.com/es/charleston/lugares-embrujados/casa-battery-carriage/