La maldición del Teatro Romea de Murcia

El Teatro Romea de Murcia situado en pleno centro de la capital, edificado en el siglo XIX, es quizá uno de los edificios más significativos de la ciudad del Segura y son muchos los murcianos que allí han acudido a disfrutar de alguna representación.
Cuenta la leyenda que sobre el Teatro Romea recae una terrorífica maldición. Corría el siglo XIX cuando, mediante la Desamortización de Mendizábal, el Estado confiscó numerosos bienes a la Iglesia. Esta ley afectó al convento de Santo Domingo, al que le quitaron el huerto y el cementerio.
Esto motivó la ira de los frailes que, según se cuenta, maldijeron al teatro con tres incendios debido a que, según se dice, justo los terrenos expropiados contenían el cementerio del convento.
El primero de ellos tuvo lugar en 1877 donde no murió nadie, el segundo acaecido en 1899 fallecería un joven de 17 años durante la representación de la obra “Jugar con fuego” y en el tercer incendio, se producirá cuando el teatro complete el aforo.
Con el tiempo han aparecido diferentes versiones sobre esta superstición pues una de ellas apunta que la maldición pronosticó tantas destrucciones como reconstrucciones sufriera el teatro, mientras que otra sostiene que esta auguró sucesivos incendios sin más.
Asimismo, existe una tercera leyenda, aún más explícita, que asegura que los dominicos profetizaron exactamente tres incendios, cada uno de los cuales sería más devastador que el anterior.
Desde entonces, se dice que el teatro siempre deja una entrada sin vender para que de esta manera nunca se pueda cumplir la tercera maldición.
Fuente: https://cmonmurcia.com/