Las Hadas de Cottingley
En 1917, dos niñas se fotografiaron rodeadas de lo que parecían ser hadas. Durante los siguientes 70 años, se enfrentaron al escrutinio de los críticos y a las acusaciones de perpetrar un engaño. Durante décadas, sostuvieron que las fotos de hadas eran genuinas.
Aunque con implicaciones intrigantes y después de mucho acoso, la historia cambió un poco. Una de las niñas, Elsie Wright (1901-1988), declaró a la BBC en 1977: “Son fotografías de ficción realizadas de nuestra imaginación”.
Algunos tomaron esto como una respuesta para evadir a los medios de comunicación, otros como una admisión de fraude, varios como que las fotos fueron tomadas psíquicamente. Toshio Akai, un miembro de la facultad de humanidades y ciencias en la Universidad Kobe Gakuin en Japón, explicó lo que significa tomar fotos “psíquicamente”, en su artículo “Las fotografías de hadas de Cottingley y las fotografía de espíritus”.
En ese momento, Akai dijo que “el experto en fotografía Fred Barlow, estaba convencido de que las fotos fueron tomadas” psíquicamente, lo que significa que fue la capacidad de ser médiums de las dos niñas y de potenciarse entre ellas lo que les permitió capturar entidades espirituales en imágenes”.
Al principio Barlow era un escéptico sobre esto, se consideraba un experto en fotografía psíquica, y particularmente en la detección de falsificaciones, pero cuando un investigador de la Sociedad Teosófica siguió a Elsie, y a su primo, Frances Griffiths, Barlow se convenció.
Polly Wright, la madre de Elsie, fue a una reunión de la Sociedad Teosófica en Bradford en 1919, y le mostró las fotos de hadas a uno de sus miembros, preguntándole si podrían ser reales. Se corrió la voz y a principios de 1920 le llegó al teósofo, Edward Gardner.
Ambos padres de Elsie “buscaron la cesta en el dormitorio de las niñas con la idea de encontrar papeles o restos de imágenes o recortes, incluso bajaron al arroyo donde las tomaron en busca de evidencia de falsificación. No encontraron nada.
Gardner fue donde las chicas y les dio más placas fotográficas, pidiéndoles que tomaran más fotos de las hadas. En secreto marcó las placas para asegurarse de que no las cambiarían. Las chicas produjeron tres fotos más con las hadas en ellas.
Joe Cooper, en su artículo de 1982, “Cottingley: Por fin la verdad”, escribió que los padres de Elsie “buscaron tanto en el dormitorio como en la cesta papeles restos de imágenes o cortes, y también bajaron al arroyo buscando evidencia de falsificación. No encontraron nada, y las niñas mantuvieron firmemente su historia de que habían visto a las hadas y las fotografiaron”.
El afamado autor Sir Conan Doyle se interesó por el caso y sostuvo que las chicas de hecho habían capturado fotos de estos espíritus de la naturaleza, a las que él llamó “los habitantes en la frontera”.
El padre de Elsie no estaba convencido, a pesar de que su madre fue persuadida a creer en las hadas. Arthur Wright es citado por Cooper diciendo que le resulta difícil creer que estos hombres podrían ser engañados “!por nuestra Elsie, quien estaba entre las ultimas de la clase!”
El prominente novelista Henry de Vere Stacpoole escribió de las fotografías: “Mira la cara de Alice [los seudónimos Alicia e Iris se utilizaron en la difusión de las fotos para proteger la privacidad de las niñas]. Mira el rostro de Iris. Hay una extraordinaria cosa llamada VERDAD que tiene 10 millones de rostros y formas, es la moneda de Dios y un acuñador o falsificador bueno no podría imitarla”.
Harold Snelling, fotógrafo profesional conocido por ser un experto en falsificaciones por más exigentes que estas sean, fue llamado para analizar las fotografías. Akai escribió: “El juicio de Snelling confirmó que las imágenes no fueron el resultado de una doble exposición, y algunos de los objetos, especialmente algunos duendes de la primera foto, en realidad se movían cuando fueron fotografiados”.
Las fotos fueron criticadas debido a que algunos duendes mostraban peinados contemporáneos, como si fueran sacados de recortes de revistas. En un libro de fotografías de la época, “Princess Mary’s Gift Book”, descubrieron figuras muy similares. Los defensores de la teoría de la fotografía psíquica atribuían esto a las chicas que mezclaron estas impresiones con las hadas que vieron.
En 1976, Austin Mitchell de Yorkshire Televisión entrevistó a Frances y Elsie en el arroyo donde fueron tomadas las fotos. Cuando Mitchell preguntó si Elsie falsificó las fotografías, Frances, dijo: “Por supuesto que no. Díganos cómo podía hacerlo, recuerde que ella tenía 16 años y yo 10. ¿Cómo podría una niña de 10 años, ir a través de la vida y guardar un secreto así?”
Por desgracia, en la década de 1980, las chicas cambiaron su historia y dijeron que habían falsificado las fotografías. Pero mantuvieron que Frances fue capaz de ver hadas reales, y que trucaron las fotografías para vengarse de los adultos que despreciaron su creencia en las hadas. Utilizaron las hadas de papel dibujadas por Elsie que tuvieron como modelos a las figuras de “Princess Mary’s Gift Book” sosteniéndolas con alfileres.
Aunque Elsie dijo que no todas las fotografías eran falsas, Frances sostuvo que la quinta foto no era falsa, a pesar de que las otras lo eran.
Ella le dijo a Cooper: “Fue un sábado en una tarde húmeda y justo estábamos cerca deambulando con nuestras cámaras y Elsie no tenía nada preparado. Vi a estas hadas que se acumulan en los pastos y sólo apunté la cámara y tomé la fotografía”.
Fuente: http://www.lagranepoca.com/