El asesinato de Emmett Till

Emmett Louis Till, un adolescente afroamericano nacido en Chicago, fue brutalmente asesinado en la madrugada del 28 de agosto de 1955 en Mississippi cuando solo contaba con 14 años de edad después de que según los informes, coqueteara con una mujer blanca.
A pesar de las reticencias de su madre, que le avisó que tuviera cuidado pues el Sur no era Chicago, Till llegó a Money, Mississippi el 21 de agosto de 1955.
El 24 de agosto, él y su primo Curtis Jones salieron de la iglesia junto con algunos muchachos locales, con quienes fueron al Bryant’s Grocery and Meat Market, una pequeña tienda, para comprar dulces.

Tienda de Roy Bryant donde Emmett Till silbó a Carolyn
Los adolescentes eran hijos de aparceros y habían estado recogiendo algodón en todo el día en el colmado propiedad de una pareja blanca, Roy Bryant, de 24 años, y su esposa, Carolyn, de 21 años.
Carolyn estaba sola en la tienda ese día; su hermana se encontraba en la parte trasera de la tienda y Jones dejó a Till con los otros chicos, mientras que él se quedó jugando a las damas en la calle.
Según algunos, Till al ver a la bella Carolyn, le silbó con admiración y esta se ofendió. Otros afirman que Till al salir de la tienda se despidió de Carolyn diciéndole «Chao baby» y otra versión consta de que Till empezó a coquetear con Carolyn diciéndole «No temas de mí. Ya he estado con mujeres blancas anteriormente».
Carolyn amenazó a Till y a los demás con una pistola y los adolescentes se fueron pero según se cree, tras el incidente Emmett había expresado su deseo de regresar a Chicago pero no se lo mencionó a su tío ya que tenía miedo de que se enfadara.

Lugar donde se produjo el secuestro de Emmett Till
Roy Bryant se encontraba de viaje en aquel momento pero a su regreso, el 27 de agosto, y cuando se enteró de ello interrogó a varios hombres afroamericanos en la tienda e incluso llegó a secuestrar a un hombre que creyó culpable, antes de conocer la identidad de Emmett Till.
Esa misma noche, de madrugada, Roy Bryant, de 24 años de edad, se dirigió a casa de Moses Wright acompañado de su medio hermano John William Milam, de 36 años de edad, y de otro hombre de identidad desconocida en busca de un niño de 14 años llamado Emmett Till.
Ambos hombres llevaron a Emmett a un granero situado en las afueras y allí le propiciaron una brutal paliza para luego dispararle en la cabeza y arrojarle al río Tallahatchie con un peso al cuello.

El río Tallahatchie donde se encontró el cuerpo sin vida de Emmett Till
Cuando la policía comenzó a investigar la desaparición del adolescente, los hombres reconocieron haberle sacado de casa de su tío, pero aseguraron haberle dejado en la puerta de la tienda de Bryant esa misma noche, y ambos fueron arrestados por secuestro.
Su cuerpo fue encontrado mutilado tres días después por dos chicos que se encontraban pescando en el río Tallahatchie y con el paso del tiempo y las insistencias de la familia en julio de 2018 se anunció la reapertura del caso.
A pesar de que el cadáver se encontraba totalmente desfigurado y en estado de descomposición, Emmett pudo ser identificado gracias a que llevaba un anillo de plata grabado con las iniciales «L. T.» y la fecha «25 de mayo de 1943».
Willie Reed, un aparcero negro que trabajaba para Milam, afirmó en el documental de 2003, «El asesinato de Emmett Till», que escuchó a Till mientras era golpeado por los tres hombres en un cobertizo de herramientas, gritando en agonía.

Ron Bryant y John William Milam durante el juicio
El asesinato de Emmett Till apareció en todos los titulares estadounidenses e internacionales y cincuenta mil personas negras asistieron a su funeral en Chicago.
La investigación abierta en la época permitió sentar en el banquillo a dos personas, el marido y el hermano de la mujer con la que Emmett había «coqueteado».
Durante el juicio, los dos negaron su implicación y cuestionaron incluso que el cadáver encontrado fuera el de Emmett y entonces fueron absueltos gracias a las 12 personas del jurado, o sea, todas blancas.

El jurado compuesto en su totalidad por 12 hombres blancos
Años después, conscientes de que las leyes impiden juzgar dos veces a una persona por un mismo delito, confesaron haber apaleado y matado al joven como castigo a su osadía.
Dos documentales realizados con la ayuda de historiadores amparan ahora una teoría diferente: sostienen que en ese crimen hubo al menos cinco implicados más, algunos quizá todavía vivos. Los datos que aportan han sido suficientes para forzar al FBI a reabrir el caso.
En 2008, Carolyn Bryant, confesó en una entrevista a Timothy Tyson, autor del libro «The Blood of Emmett Till» (2017) que se había inventado la acusación y que Till nunca le dirigió ninguna palabra o gesto provocativo.
Fuente: https://criminalia.es/asesino/asesinato-de-emmett-till/