El caso ovni Ummo
Todo comenzó a principios de la década de los años 60, Fernando Sesma era un fanático del creciente fenómeno ovni, el solía dibujar símbolos en el suelo para ver si podía canalizar algún mensaje de seres de otros mundos.
En la calle de Alcalá de Madrid existía un lugar llamado “la ballena alegre”, en donde diversas personas se reunían para hablar sobre temas de esoterismo, religión, ovnis entre otros. Para 1966 Sesma comenzó a recibir llamadas telefónicas y cartas de unos seres denominados a si mismos como UMMITAS.
Por años se recibieron centenares de cartas donde revelaban diversos datos de su planeta, estructura social, economía y religion. Además aportaban datos científicos relacionados con matemáticas, física, biología, psicología y muchas otras ramas de la ciencia.
En el año 1934 aproximadamente, un barco noruego estaba intentando comunicarse por medio de un revote ionosferico. Se menciona que las ondas de la comunicación atravesaron el planeta, llegando hasta el planeta Wolf 424, que es el planeta de los ummitas. Así se describe en las cartas.
Los ummitas recibieron el mensaje 15 años después, y en su análisis no identifican el lenguaje y no lograron descodificarlo, no correspondía a ruido espacial ni tampoco a una civilización conocida por ellos.
Después de esto el 28 de marzo de 1950 se enviaron naves a la tierra a realizar una investigación aterrizando en Francia, cercano a los Alpes. Después de esto los ummitas se pusieron en contacto con diversas personas, principalmente científicos e ingenieros de todas partes del mundo, aunque con preferencia por la ex unión soviética y estados unidos.
Unos años después, en la década de los 60s, se pusieron en contacto con personas en España, principalmente con Fernando Sesma, el cual se reunía habitualmente con diversas personas interesadas en “la ballena alegre”.
Un ente que se autodenomino DEI 98, tuvo contacto directo con Sesma, el cual le realizaba llamadas telefónicas, y le hacía llegar misivas. Todas esas cartas tenían un sello específico, que al parecer identificaba a esta supuesta sociedad extraterrestre. Durante un tiempo hubo variadas comunicaciones pero no fue sino hasta febrero de 1966, cuando se dio la noticia que un objeto volador no identificado sobrevoló el barrio de Aluche, y se menciona que incluso realizo un aterrizaje dejando varios testigos.
Uno de los testigos en esta historia, se trata del psicólogo Jordan Peña, el cual pudo deslumbrar el ovni en su transcurso por la carretera, otro hecho importante en este avistamiento fue el testimonio de unos miembros del ejército, los cuales llegaron a un bar llamado “Palencia” y en el lugar ellos discutían sobre lo increíble del suceso.
A la mañana siguiente Jordan Peña acompañado por varios escépticos acudieron a la ballena alegre, discutieron los hechos sin llegar a una explicación lógica.
Otro avistamiento más ocurrió el 1 de junio, un platillo volador apareció aparentemente a los alrededores de los castillos de san José Balderas dejando decenas de testigos. El platillo mostraba en su pansa el misterioso símbolo ummita, y llego hasta la colina de Santa Mónica, lugar donde supuestamente aterrizo durante unos segundos.
En el lugar se encontraron unos tubos, los cuales fueron localizados junto a las huellas del ovni. De esos tubos salió un supuesto líquido el cual aparentemente era agua. Un sujeto llamado Henti Dagouse ofreció dinero por cilindro. Una de las muestras fue llevada ante varios investigadores del instituto nacional de técnica aeroespacial, indicando que era una aleación de níquel extremadamente pura.
Presumiblemente los sucesos siguieron sucediendo hasta la década de los 90s, en donde una infinidad de cartas y llamadas telefónicas fueron enviadas a muchas personas. Tiempo después en el año 1996 Jordán Peña se adjudicaba la autoría de todo el caso ummo. No obstante algunas personas más hicieron lo mismo durante el transcurso de los 60s a la fecha.
El caso ummo es fascinante, y resulta importante para la ufología en general, a día de hoy y a pesar de que supuestamente esta “desmentido” no existe aún una prueba definitiva que lo desapruebe o bien que lo afirme. Existen aún testigos de esos años que afirman y tienen en su poder las cartas de los ummitas, y cabe mencionar que en esas misivas no se revelaban simples fórmulas matemáticas que se enseñan en carreras de ingeniería, contenían conocimientos profundos en ciencias, que no cualquier persona comprendería.
Adicionalmente datos concretos como: la comunicación del buque noruego, o la llegada de los ummitas a la tierra, que describen la portada de un diario francés de esa época, los conocimientos aportados en las cartas y otros tantos datos que dejan mucho que pensar.
Fuente: https://granmisterio.org/