Callejón del Oro de Praga

El Callejón del oro es una célebre calle de Praga ubicada al lado del Castillo de Praga en el distrito de Hradcany que se caracteriza por poseer una fila de once coloridos edificios relativamente bajos, que fueron construidos con un estilo manierista a finales del siglo XVI, para albergar en un principio a los veinticuatro guardias del emperador Rodolfo II de Habsburgo (1555 – 1612) y sus respectivas familias.
En 1597, el rey Rodolfo II de Habsburgo, curioso, políglota y gran mecenas de las artes y las ciencias, dio la orden de construir entre los huecos que había en los arcos de la muralla del castillo; las residencias de los veinticuatro guardias y artilleros que se encargaban de custodiar el castillo, a cusa de la destrucción por un incendio de los barracones de madera en los que vivían.
El emplazamiento de estas casas se debió probablemente a la falta de espacio en las zonas alrededor del Castillo de Praga o tal vez, al descontento de la abadesa del Convento de San Jorge, que se quejaba del comportamiento de estos hombres.
El Callejón del Oro de Praga le debe su nombre a los orfebres, que un siglo después de ser construidas, ocuparon las casas, habitando en ellas varios siglos.
Se le conoce también como “la calle de los alquimistas” debido a una leyenda en la que se cuenta que en ella residían los alquimistas que intentaron así transformar el hierro en oro en sus alambiques para el rey Rodolfo II y producir la piedra filosofal y el elixir de la vida.
Sus primeros habitantes fueron los tiradores rojos, guardias del Castillo de Praga, quienes en el año 1597 pidieron al Emperador Rodolfo II el permiso de poder construir pequeñas viviendas en los arcos del muro norte que estaba recién reformado.
Desde ese momento hasta la Segunda Guerra Mundial vivía en el Callejón del Oro la gente de todo tipo, comenzando por los guardias que aparte de proteger el Castillo, se dedicaban a otros oficios para ganar algo más de dinero.
En la casa n. 22 pasó un año de su vida el escritor checo de origen judío Franz Kafka pues resulta que esta casa pertenecía a su hermana y entre 1916-1917 se la ofreció como un lugar tranquilo para realizar en ella la creación literaria, o sea, fue allí donde escribió su libro «Un médico rural».
Antes de la Segunda Guerra Mundial en una de las casas vivía la famosa vidente Matylda Průšová, que era conocida también por su nombre artístico Madame de Thébes, quien predijo la caída del Tercer Reich, por lo que fue detenida por la Gestapo y torturada hasta morir durante el interrogatorio.
Durante la Segunda Guerra Mundial el aficionado a la historia del cine Josef Kazda en la casa n. 12 resulta que escondió muchas copias de las películas que los nazis querían destruir y las proyectaba a todos sus invitados.
Una curiosidad a destacar, es que en el Callejón del Oro se encuentra también la casa más pequeña de la ciudad de Praga, la n. 13.
En 1953 compró las casas del Callejón de Oro la oficina del presidente y las reformó. De esta época son las fachadas coloridas como las conocemos en la actualidad.
Entre los años 2010 y 2011 se realizaron importantes reformas y de esta época es la exposición que está en 9 de las 16 casitas y nos acerca la vida de la gente que vivía allí durante toda la historia del Callejón del Oro.
También podemos destacar, que por encima de las casas pasa una Galería defensiva, donde se puede ver una muestra de armaduras e instrumentos de tortura medieval.
Fuente: https://freetourpraga.com/callejon-del-oro/