La Honjo Masamune: la legendaria espada samurái de la dinastía Tokugawa

La Honjo Masamune es una espada que fue forjada por el famoso fabricante de espadas Goro Nyudo Masamune pues es una de las más famosas espadas de la historia japonesa, y en cierto momento llegó incluso a convertirse en uno de los tesoros nacionales del país.
Tras el fin de la Segunda Guerra Mundial, no obstante, esta famosa espada desapareció, y como consecuencia de ello su paradero sigue siendo un misterio aún a día de hoy.
Masamune es a menudo considerado uno de los más grandes fabricantes de espadas de Japón de todos los tiempos pues aunque se desconoce cuándo vivió y murió tradicionalmente se ha creído que forjó la mayor parte de sus espadas a finales del siglo XIII y principios del XIV.
Donde quizás quede mejor reflejada la personalidad de Masamune es en la historia de Masamune y Muramasa. Este relato, cuya veracidad es bastante improbable, nos habla de una competición entre dos forjadores de espadas para determinar cuál de los dos era el más grande en su arte.
En una de las versiones de este relato, las dos espadas, ya acabadas, se dejaron suspendidas sobre la corriente de un río para probar su calidad donde la espada de Muramasa cortó todo aquello con lo que entró en contacto.
Sin embargo, la de Masamune sólo las hojas que flotaban en la superficie del río donde los seres vivos, parecían rebotar en el filo de la espada de Masamune.
Cuando Muramasa observó esto, creyó que la espada de Masamune no estaba lo suficientemente afilada y pensó que había ganado pero cuando Muramasa ya saboreaba su victoria, un monje itinerante se ofreció para dar su veredicto.
Este monje llevaba un rato observando la competición entre los dos hombres, y decidió que la espada de Masamune era de más calidad que la de Muramasa.
Según el monje, la espada de Muramasa era una creación maléfica y ávida de sangre, ya que lo cortaba todo en pedazos indiscriminadamente que en comparación, la espada de Masamune no mataba innecesariamente.
Tras la decisión dada por el monje y debido a la ‘benévola’ naturaleza de su espada, Masamune fue declarado como el mejor fabricante de espadas de los dos.
La Honjo Masamune recibe su nombre del general Honjo Shigenaga que vivió en los siglos XVI y XVII, y combatió al servicio del clan Uesugi del norte de Japón.

Réplica de la Honjo Masamune expuesta en la Biblioteca Truman
Shigenaga se convirtió en dueño de esta espada en 1561, tras la 4ª batalla de Kawanakajima pero al principio de la batalla, la espada pertenecía a un general enemigo que desafío a Shigenaga a un duelo singular.
En el transcurso del duelo, el rival de Shigenaga consiguió partir en dos el casco del samurái con su espada pero al final del combate, sin embargo, Shigenaga salió victorioso y se apoderó de la espada de su enemigo como trofeo.
Shigenaga conservó la espada durante muchos años antes de vendérsela a finales del siglo XVI al clan Toyotomi, que dominaba Japón por aquel entonces.
Derrocados los Toyotomi, la espada pasó a ser propiedad del nuevo shogún de Japón, Tokugawa Ieyasu de tal forma que lla espada se convirtió en tesoro familiar y símbolo de la dinastía Tokugawa.
Fue así como la Honjo Masamune fue pasando como herencia familiar de un shogún a otro pero tras la caída del shogunato de los Tokugawa, en 1868, la espada continuó en poder de la familia.
Está documentado que hacia el final de la Segunda Guerra Mundial la Honjo Masamune estaba en poder de Tokugawa Iemasa pues tras la rendición de Japón, los aliados exigieron a todas las familias de la nobleza japonesa que entregaran sus colecciones de espadas.

Los aliados decomisaron miles de katanas tras el fin de la II G.M.
El Presidente de la Cámara de los Pares de Japón, decidió dar ejemplo y ejercer como representante de la razón, y entregó la colección de espadas de su familia y entre ellas se encontraba la Honjo Masamune.
El hombre que presuntamente recibió la espada fue un sargento conocido como ‘Coldy Bimore’, aunque no existen registros históricos que atestigüen su existencia.
De este modo, el destino de la Honjo Masamune se convirtió en un misterio desde entonces pero aún hay esperanzas de que algún día pueda encontrarse la famosa espada.
Se sabe que en el año 2013 llegó al Museo Nacional de Kyoto una espada para ser tasada y al año siguiente, se descubrió que se trataba de una de las espadas de Masamune, más concretamente la conocida como Shimazu Masamune.
El dato más reciente que se conocía en relación con el paradero de la Shimazu Masamune se remontaba al año 1862, en el que fue entregada por Tokugawa Ishige a la familia imperial con ocasión de su boda con la princesa Kazunomiya. No obstante, se trata de la única espada Masamune hallada en los últimos 150 años.
Fuente: https://www.ancient-origins.es/artefactos-otros-artefactos-noticias-general/busca-la-honjo-masamune-la-legendaria-espada-samur%C3%A1i-la-dinast%C3%AD-tokugawa-003427