El fantasma de la Abadía de Lucedio

La abadía Lucedio fue construida en 1123, cuando fue dado una gran superficie de terreno pantanoso a los monjes cistercienses por el Marqués de Montefract dedicándose al cultivo de arroz con éxito.
Sin embargo, hubo acontecimientos más oscuros que ocurrieron debajo de la superficie de este monasterio aparentemente normal pero desbido a sus fenómenos paranormales ha sido objeto de investigación.
Según las leyendas locales, un grupo de brujas celebró un aquelarre en el cementerio cercano de Darola durante el cual el mismo Lucifer se materializó poseyendo a las jóvenes novicias del convento de Trino Vercellese, no muy lejos de Lucedio, quienes lograron seducir a los monjes.
Lo que siguió fue un siglo de perdición, pecado y satanismo en la abadía pues el Papa Pío IX finalmente cerró el monasterio pues las acusaciones de tortura, magia negra, abuso sexual y violación abundaban.
Los historiadores, sin embargo, tienden a creer que estas acusaciones fueron hechas para destruir una comunidad que se había vuelto demasiado poderosa y rica para su propio beneficio.
Se dice también que Pío había tenido la presencia demoníaca, la cual creó el caos en Lucedio, encarcelado y capturado en una cripta secreta debajo de la iglesia de la abadía de Santa María.
La cripta fue también donde fueron enterrados los abades, y algunos de ellos fueron enterrados en una posición circular, se dice que lo hicieron para asegurarse de que mantienen un ojo en su prisionero demoníaco y misteriosamente, todos los abades quedaron momificados de forma natural.
En el interior hay una cámara que se llama La Sala del Juicio Final, se dice que es donde los monjes satánicos hacían los juicios a las personas por diversos «delitos».
Estos prisioneros eran generalmente hombres jóvenes, que eran sodomizados y torturados pues hay un pilar en la sala que se cuenta que está permanentemente húmedo, de las lágrimas de los presos, mientras que los escépticos han atribuido a un techo con goteras.
La abadía cambió de manos muchas veces después de haber sido cerrada y una vez incluso perteneció a Napoleón Bonaparte y muchos mitos rodean la abadía entre ellos: los cuentos de gritos, cánticos, nieblas misteriosas, extrañas formas, figuras encapuchadas e, incluso, la aparición de los demonios abundan.
Fuente: https://www.italy-villas.es/en-italia/2016/noroeste-de-italia/piamonte/lucedio-abad%C3%ADa