El fantasma del Palacio de los Saavedra de Murcia
La casona de la calle Rambla alberga hoy en día el Colegio Mayor Azarbe, dependiente de la Universidad de Murcia, pero no siempre fue así. El edificio se construyó por orden de Gregorio de Saavedra y Fontes en 1648, sobrino del diplomático Diego Saavedra y Fajardo, coincidiendo con la epidemia de peste que asoló Murcia; y siguió en manos de la familia hasta que fue vendida en 1886.
Sobre la casa circulan historias de fantasmas que hunden sus raíces en la supuesta deshonra cometida por una de las mujeres de la familia Saavedra al dejarse seducir por un extranjero. Cuenta la leyenda que la joven fue emparedada viva en lo alto de la torre desde donde su fantasma se lamentaba y pedía a gritos ser liberada.
Con el paso del tiempo, los vecinos de la Rambla del Cuervo empezaron a escuchar murmullos y lamentos que venían de una de las ventanas del torreón del palacete. Noche tras noche esos murmullos fueron aumentando hasta convertirse en alaridos que entre luces intermitentes clamaban por su liberación.
Cada vez eran más los vecinos que confesaban no poder dormir por los gritos fantasmales, las luces, los destellos y una sombre que cruzaba como alma en pena por la ventana. Algunos decían que esta sombra era la de un duende mientras que otros decían que era la de la joven dama.
Nadie se atrevía a acercarse a la torre, el párroco fue el único que lo hizo y en el mismo momento en el que terminaba de decir amén las luces de la torre se apagaron y una paloma salió volando desde la ventana como si el alma de la joven muchacha hubiera sido liberada.
A partir de ese día los gritos, murmullos, alaridos y gemidos cesaron y el barrio de Santa Eulalia volvió a recuperar la tranquilidad nocturna que tenía antes del incidente. Desde entonces a este Palacio de los Saavedra se le conoce como la Casa del Duende.
Años más más tarde se hizo una renovación de la casa y se descubrió que en una parte del torreón (donde se dice que se encontraba la joven) sólo se puede acceder a la misma desde el tejado. Por lo que es posible que la joven dama fuera encerrada allí y no pudiera salir.
Fuente: http://murciadescalza.blogspot.com/