Tesoros rumanos ocultos- una historia maldita

Muchos grandes tesoros de oro se han encontrado en Rumania pues entre ellos podemos mencionar a la “gallina con pollitos dorados” del tesoro de Pietroasele, las monedas koson y las pulseras de oro de Dacia.
Sin embargo, hay muchos otros tesoros que se encuentran ocultos, esperando ser encontrados por los arqueólogos o por los cazadores de tesoros.
El pueblo de Stanca tiene un bosque que es buscado por muchas personas de todo el país con la esperanza de que puedan encontrar el tesoro escondido allí.
Este bosque se encuentra cerca de Vama Sculeni, Iasi que según los cuentos locales, se ha estado excavando con el objetivo de encontrar el resto del tesoro del boyar local (un aristócrata ruso de alto rango).
En el año 1941, muchos kilogramos de joyas de oro fueron encontrados allí y aún hoy en día, los cazadores de tesoros todavía esperan encontrar el resto del tesoro.
En Izverna, generaciones de cazadores de tesoros han desenterrado más de 100 kilogramos de monedas de oro pues según la leyenda, en la cueva de Izverna, los tesoros de Obrenovici y María Teresa se han ocultado.
El príncipe serbio llamado Obrenovici había discutido con su hermano Mihailo, por lo que llegó a Rumania con 80 caballos cargando con bolsas llenas de oro.
El tesoro estaba oculto y todos los soldados serbios que habían venido con él fueron asesinados pues la única pista del lugar donde estaba escondido el tesoro es una piedra con una serpiente tallada en él.

María Theres Obrenovici
Otra leyenda habla de la cueva de veterani donde el acceso a esta cueva solo es posible en barco y según los cazadores de tesoros, se dice que el famoso tesoro de plata de María Teresa y los tesoros del zar serbio Obrenovici están escondidos en una caverna bloqueada con piedras.
El lago Bottomless también está rodeado de leyendas que hablan de tesoros. Este lago también se llama “El Estanque de Oproiu” y está ubicado en el pueblo de Negresti, en el condado de Mehedinti.
Según las leyendas locales, en el pasado lejano los aldeanos de Negresti lanzaron cajas llenas de tesoros dentro del lago por temor a un ataque pues pocos se atreven a acercarse al lago hoy porque es un paraíso para las serpientes.
En Rumania, hay numerosas leyendas que hablan de tesoros escondidos pues se dice que quien descubre un cierto tesoro debe respetar varias tradiciones y rituales o tendrá un final trágico.
En el área de Dobrogea, se dice que el único que puede desenterrar un tesoro es la persona que descubrió por primera vez dónde estaba escondido.

El estanque de Oproiu
En Banat, se dice que las llamas azules bailan sobre los lugares donde se han enterrado tesoros en la noche de San Jorge y sólo una persona que ha visto las llamas puede encontrar el tesoro.
Otra leyenda interesante sobre el tesoro habla de un cierto lugar donde se abre una roca para revelar una cámara del tesoro pues se dice que una vez en cada siete años, después de recorrer siete veces la antigua fortaleza, se abre la roca en Magura Beiului y dentro hay una cámara de tesoros.
En ella una voz tienta a los vivos a entrar y tomar parte del tesoro pero si se vuelven codiciosos y permanecen allí durante demasiado tiempo, la roca se cerrará, atrapando a los cazadores de tesoros para siempre.
En el área de las cuevas de Banat, Constantin Brancoveanu escondió más de 20,000 bolsas llenas de monedas de oro y luego se negó a decirle a los turcos dónde estaba esto, por lo que terminó siendo decapitado.
En Baragan hay innumerables tesoros malditos donde se dice que las personas que los encuentran estos mueren terriblemente motivados por su codicia.
Los tesoros también han sido enterrados en valcea por boyardos; al tiempo que cerca de Baile Olanesti, se dice que el tesoro del monje Pahomie fue enterrado cerca del monasterio con el mismo nombre.
Fuente: https://www.ancient-origins.es/mitos-leyendas-europa/tesoro-rumano-005247