El misterioso asesinato del hospital psiquiátrico de Luján
Corría el domingo 16 de junio de 1985 cuando la doctora Cecilia Giubileose guardó exactamente tres cigarros en el bolsillo. Quería disfrutar de ellos aquella noche mientras hacía guardia en el hospital psiquiátrico de Luján (al norte de Argentina). Una vez acabado su trabajo diurno (que consistió en visitar a algunos dementes y recetar un par de medicamentos) se dirigió hacia una casa especialmente adecuada para pasar las largas noches cerca de aquel centro.
Su presencia era requerida por si algún interno necesitaba ayuda. Aquella noche se hallaría sola. Temerosa de la oscuridad, pidió a un paciente en el que tenía confianza que la acompañara hasta allí y, una vez en la estancia, cerró la puerta y se dispuso a abrir un libro para no dormirse. Todo parecía ir sobre ruedas. No había mayores contratiempos que los que podía provocar tener que mantenerse con los ojos abiertos varias horas.
Sin embargo, al día siguiente la doctora no acudió a fichar. Nunca más se la vio. En la zona, tan solo hallaron su pequeño Renault 6 y un par de zapatos de mujer que podrían haber pertenecido a ella. Curiosamente, su cama apareció hecha, como la del resto de los internos.
¿Dónde se encontraba la mujer? El misterio nunca fue desvelado. Según dijo el interno que la acompañó a la policía, había visto llegar un coche negro que se la podía haber llevado. Ante el desconcierto y el secreto de sumario fueron muchos los rumores que se crearon en torno a su persona. Algunos hablaron de una secta que podría haberla raptado. Otros dijeron que había sido asesinada porque estaba investigando una supuesta red de trasplantes de órganos en el centro.
Sea como fuere, lo único que se encontró de ellas tras múltiples batidas en la zona fue su cartera. Lo que fue de esta médica sigue siendo, a día de hoy, un enigma sin resolver.
Fuente: http://www.abc.es/