Las Hermanitas Satánicas

En marzo de 2000 los vecinos del barrio de Saavedra, en Buenos Aires, Argentina, habían denunciado gritos y ruidos extraños que se sucedieron durante toda la noche anterior.
Todo esto habría formado parte del rito de purificación que, según los investigadores, se habría sacado de unos folletos que la más joven tenía de un curso de alquimia y en esos papeles estaban detallados los pasos del ritual, aunque en ningún caso se incluía el cuchillo y la sangre.
La policía llegó a la casa de los Vázquez en el momento en el que Silvina estaba a punto de atacar a Gabriela y fue cuando se encontraron con una escena escabrosa.
El cuerpo de un hombre mayor yacía desnudo en el piso rodeado por un charco de sangre. Sobre él, una joven también desnuda que no paraba de apuñalarlo con un cuchillo de cocina, y a unos pocos metros su hermana mayor atestiguando la escena.
“Váyanse, esto no es real”, “Sal Satanás”, y “Mamita, mamita, ahora papito se va a volver bueno”, vocifera la asesina como si estuviera poseída.
La madre había fallecido años antes y la relación de ellas con el padre no era buena y en la búsqueda de soluciones mágicas ambas hermanas asistieron a un centro esotérico.
Lo que ocurrió aquella noche fue el final inesperado de un ritual de purificación donde el cuerpo del hombre, a quienes ellas creían maldito como la casa, acabó con más de cien puñaladas y el rostro parcialmente mordisqueado.
La investigación estableció que ambas padecían distintos grados de esquizofrenia no tratada, que en el marco de un culto generó el episodio psicótico de triste final.
Fuente: https://creepypasta.fandom.com/es/wiki/Las_Hermanas_Satanicas