La terrorífica historia real tras la película “Al final de la escalera”

Si hay una película que se considera un clásico del cine del terror esa es, sin duda, “Al final de la escalera”, en ella se daba toda la fenomenología paranormal que se puede detectar en una casa encantada y que llena de miedo a todo aquel que tiene la oportunidad de vivirlo.
Se estrenó en el año 1980 y se fundamente en una historia real donde lo imposible se hace realidad mezclado con una serie de tramas que hoy podrían ser portada de cualquier diario o informativo.
Pero la película se basa en hechos reales sucedidos al arreglista musical Russell Hunter tras mudarse a una casa situada en Cheesman Park (Denver) a finales de los años 60.
El 9 de febrero de 1969 comienza a vivir todo tipo de fenómenos paranormales en la vivienda, desde golpes a grifos que se abrían y cerraban solos como movidos por unas manos invisibles o puertas que se abrían y se cerraban con una violencia descomunal.
Así fue como un día, buscando, pudo descubrir una escalera escondida que daba a otra planta donde pudo hallar pues un mueble con cuadernos y diarios de un niño de 9 años discapacitado que solía jugar con una pelota que tenía como el único juguete.
Dejó todo allí pero días más tarde sintió como por la escalera bajaba algo: era la pelota rodando sola y bajando así las escaleras como lanzada por una manos invisibles.
La sesión de espiritismo de la película es real pues Hunter la hizo y descubrió que era el fantasma de un niño enfermo y heredero de una gran herencia. Se llamaba Henry y era el sobrino, luego adoptado como hijo, del abogado Henry Treat Rogers y su esposa Kate.
Al niño le dejó su abuela una fabulosa herencia que sólo cobraría con la mayoría de edad pero se trataba de un niño enfermo que murió pronto y al que sus padres sustituyeron por un huérfano al que educaron como el difunto Henry.
Habían sustituido a su hijo para cobrar el dinero aunque, al contrario que la película, no lo asesinaron sino que resulta que fue enterrado en secreto.
En una de aquellas sesiones de espiritismo el fantasma le indicó donde estaba su improvisada tumba donde, resulta el que encontraron restos humanos y un medallón en el que figuraba “Henry” y por ello tras ese hallazgo los fenómenos paranormales aumentaron siendo absolutamente descontrolados y terroríficos.
La casa se derribó y en su lugar se construyeron apartamentos y el arreglista comentó su experiencia a William Gray y Diana Maddox quienes se encargaría de hacer una de las historias más terroríficas del cine, basada en hechos reales.
Fuente: https://www.filmaffinity.com/es/user/rating/2040349/235143.html