La Historia del Kilogramo

A finales del siglo XVII, en Francia, recién terminada la Revolución Francesa, la verificación de las medidas era un sentido popular, el espíritu de fraternidad y de igualdad que en el ambiente revolucionario flotaba se extendió hacia un sistema de unidades sin fronteras.
La unidad de longitud, el metro ya había sido tomado de la naturaleza, de las dimensiones que ofrecía la Tierra y relacionar la unidad de peso (masa) con la unidad de longitud también formaba parte del proyecto de la reforma metrológica.
Para estos estudios, la Academia de Ciencias integra la comisión correspondiente con los científicos Antoine-Laurent de Lavoisier, químico y físico, y René-Just Haüy, mineralogista.
En 1793 ya estaba prácticamente determinada el concepto que recibió la masa del decímetro cúbico de agua a la cual se le había dado el nombre de «grave».
Sin embargo, los acontecimientos de la Revolución volvieron a golpear fatalmente a los hombres de ciencia y el 10 de agosto de 1793, los recaudadores generales de impuestos que estaban al servicio del antiguo régimen son arrestados.
Entre ellos se encontraba Lavoisier quien compareció ante el Tribunal Revolucionario el 8 de mayo de 1794 y fue ajusticiado en la guillotina ese mismo día.
En 1799, se retomó el objetivo y así, Lefévre-Gineau, asistido por Fabbronni, químico italiano, vuelven a determinar la masa de un volumen conocido de agua, utilizando el sistema de pesadas sucesivas en el agua y en el aire, de un cilindro hueco de latón, de dimensiones cuidadosamente determinadas; de ello, dedujeron la masa del decímetro cúbico de agua destilada tomada a la temperatura de su máxima densidad.
Conforme los resultados obtenidos fueron construidos el patrón del metro y el del kilogramo, ambos de platino, metal que había sido descubierto en 1735, para materializar los patrones de las unidades que acababan de ser determinadas.
Estos patrones fueron depositados el 22 de junio de 1799 en los Archivos de la República y una nueva ley del 10 de diciembre de 1799 establecía que los patrones de los Archivos eran los patrones definitivos de las medidas de longitud y de peso de toda la República Francesa.
Como consecuencia de ello, las unidades de estas magnitudes ya no fueron definidas de otra manera, o sea, sólo a través de los patrones materiales de los Archivos.
En el devenir del tiempo, Francia internacionaliza el sistema cumpliendo el deseo de los hombres de ciencia que lo formaron creándose la Comisión Internacional del Metro en los años de 1870 a 1872 para dar paso a la Convención del Metro en 1875.
En 1889 se construyen los patrones de platino iridio y son depositados en la Oficina Internacional de Pesas y Medidas creada por la Convención del Metro.
Por definición, el error en la medición de la masa del IPK era exactamente cero, pues el IPK era el kilogramo pero a lo largo del tiempo se han podido detectar pequeños cambios comparando el estándar frente a sus copias oficiales.
El prototipo internacional del kilogramo parecía haber perdido cerca de 50 microgramos en los últimos 100 años, y la razón de la pérdida sigue siendo desconocida.
Fuente: http://www.cenam.mx/myd/histkg.html