Tragedia y misterio del “Titanic” soviético

Un barco hospital, el Armenia, se hundió en el mar Negro con miles de personas a bordo, soldados heridos, pero también mujeres y niños que intentaban escapar del avance de los nazis en la península de Crimea.
Se calcula que hubo cuatro veces más fallecidos que en el hundimiento en 1912 del transatlántico británico Titanic, convertido en símbolo de las catástrofes de la navegación.
El Armenia formaba parte de una flota de barcos para uso civil que empezaron a construirse en la Unión Soviética en la década de 1920, cuando el nuevo país comenzaba a recuperarse de la guerra civil.
En los astilleros Baltiski de la entonces Leningrado se comenzó a trabajar en una serie de naves que iban a ser destinadas a las rutas marítimas que unían Crimea con el Cáucaso.
Por eso, se les destinaron nombres de varias regiones de esa zona y el primero en botarse sería el Adzharia, en 1927 al que le siguieron el Crimea, el Georgia, el Abjasia, el Ucrania y, finalmente, el Armenia.
Con 107,7 metros de eslora y una manga de 15,5, este último era capaz de desplazar 5.770 toneladas y tenía capacidad para 950 pasajeros, además de una tripulación de 96 integrantes. Pero ese 7 de noviembre de 1941 al barco se subieron muchísimos más.

El «Armenia» durante su construcción en los astilleros
Tras su botadura el Armenia se puso al servicio del ejército llevándolo a los astilleros de Odessa, donde lo reconvirtieron en un hospital flotante, preparado para transportar y atender hasta a 400 heridos.
En agosto de ese 1941 entró en servicio, bajo el mando del capitán Vladímir Plaushevski pero a los pocos días su misión cambió de repente, o sea, el ejército alemán llegaba a Odessa y el barco se dedicó a labores de evacuación.
El 4 de noviembre, el Armenia partió de Tuapsé con dirección a Sebastopol, hacia donde avanzaba el ejército alemán para hacerse con el estratégico puerto de esa ciudad.

Los pasajeros embarcando en el «Armenia»
El día 6, Plaushevski recibe la orden de hacer escala en Yalta para subir a bordo a refugiados y activos locales del Partido pues cuando llegó a Yalta, en el puerto había una gran multitud.
Oficialmente, iban a bordo 5.000 personas, aunque se admite que podría haber hasta 7.000, y hay versiones que aumentan la cantidad. En ese momento, por supuesto, nadie hizo una lista para registrar los datos de los pasajeros.
El «Armenia» se disponía a zarpar cuando el Comando Naval le dio órdenes específicas de que no saliera de puerto hasta las 19:00 horas para que pudiera aprovechar la oscuridad y evitar a la aviación del Tercer Reich.

El «Armenia» en plena travesía
Sin embargo, el capitán hizo caso omiso de las directrices y puso rumbo hacia su destino (Tuapse) a plena luz del día 7 de noviembre pensando que al tratarse de un navío hospital no sería atacado por los nazis.
Menos de cuatro horas después, en pleno trayecto cerca de la costa de Gurzuf, un bombardero Heinkel He 111H del «Kampfgeschwader» 28 («Ala» 28), vislumbró en el horizonte la silueta del «Armenia» y dirigió sus alas hacia él.
El ataque se produjo a las 11:25 de la mañana y el avión, que había sido equipado con torpedos, disparó uno de ellos en dirección al casco… y dio de lleno en su proa.
El resultado fue una catástrofe mayor que la del «Titanic», o sea, el morro quedo partido por la mitad y el navío tan sólo tardó cuatro minutos y medio se fue a pique donde sólo sobrevivieron ocho personas.
El resto, entre 5.000 y 10.000 personas, fallecieron ya que no tuvieron tiempo apenas de subirse a los botes salvavidas antes de que el navío saltara por los aires.

Ubicación aproximada del hundimiento del «Armenia»
La acción ha provocado una gran controversia histórica desde entonces, ya que resulta casi imposible que el avión germano no distinguiera que el «Armenia» era un barco hospital.
Así lo corroboró un testigo que vio todo desde la costa: «Apenas el barco había llegado a mar abierto, un grupo de aviones alemanes lo atacó. No hace falta decir que los pilotos nazis podían ver las grandes cruces rojas en el barco». La pérdida del «Armenia» fue catastrófica. A día de hoy, de hecho, sigue siendo la peor en la historia naval rusa.
La noticia del hundimiento del «Armenia» llegó enseguida a Moscú donde Stalin fue informado y como consecuencia de ello realizó una ofensiva directa contra los nazis.
Fuente: https://www.clarin.com/mundo/tragedia-misterio-titanic-sovietico_0_AUgopMTVy.html