Los Tercios Españoles y el Sitio de Ostende

Un 20 de septiembre del año 1604, finalizaba el sitio de Ostende, la única ciudad de Flandes en poder de los holandeses, tras más de 3 años de asedio, siendo la campaña militar más larga de la Guerra de los 80 años.
Como base de operaciones de Mauricio de Nassau para la mayoría de sus incursiones en Flandes, Ostende tenía una gran importancia estratégica para la región, o sea, las propias provincias leales a España financiaron el asedio al objeto de poner fin a los ataques y saqueos holandeses.
Rodeada por canales fluviales y al noroeste con su puerto marítimo, la cuidad contaba con inmensas murallas y un terreno pantanoso que hacía aún más complicado el acceso.
Con una guarnición de 8.000 hombres, entre holandeses, ingleses y franceses, y con la flota angloholandesa abasteciéndola y protegiéndola desde el mar, Ostende parecía inexpugnable.
El 5 de julio de 1601 las tropas españolas comandadas por el archiduque Alberto de Austria, llegaban a Ostende y acto seguido se llevaría a cabo el sitio.
Tres Tercios españoles, los de Villar, Rivas y Monroy, tomaron partida en esta empresa y también lo hizo Sir Francis Vere, héroe británico de la batalla de Nieuwpoort, que tomó el mando de las defensas de la ciudad a mediados de julio.

Ostende en la época del asedio
Mientras las tropas españolas construían fosos, contramuros y túneles de demolición, sus cañones castigaban las murallas de Ostende, y las tropas sitiadas no tardaron en salir a romper el cerco, siendo rechazas por el Tercio de Monroy, que resultó muerto de un cañonazo, y fue sustituido por Simón Antúnez.
Las escaramuzas se producían de manera constante; el propio maestre de campo, Juan de Baracamonte, cayó abatido por fuego de mosquete, y el maestre Diego Durando, murió en un inútil intento de asalto a la ciudad.
La llegada de nuevos refuerzos por ambos bandos fue incesante ya que las pérdidas de ambos eran terribles, y los soldados españoles se amotinaron como protesta por la incompetencia de sus mandos.
La llegada de los hermanos Spínola, ricos comerciantes al servicio del rey de España, alivió la penosa situación en la que se encontraban los españoles.
Por un lado, Federico de Spínola marchó con 6 galeras para hostigar la cuidad desde el mar. Por otro, Ambrosio, con un ejército reclutado por él mismo de 8.000 italianos, partió por tierra hacia Ostende, sustituyendo en el mando de las tropas a Alberto de Austria en octubre de 1603.

Ambrosio de Spínola
Contando con la ayuda del sargento mayor Pompeo Giustiniano, reorganizó la tropa y fortaleció el asedio en el suroeste de la ciudad, acelerando los trabajos gracias a su propia iniciativa e ingenio.
Como consecuencia de ello, los combates arreciaron con la llegada de Peter van Gieselles al gobierno de la cuidad, aún siendo consciente de los avances españoles.
Para abril de 1604, Mauricio de Nassau entraba en Flandes con casi 20.000 hombres para tomar la ciudad de La Esclusa, con el fin de distraer a las tropas españolas.
El propio Spínola acudiría en su ayuda sin poder evitar la toma de la ciudad por los rebeldes pero a principios del verano los españoles consiguieron tumbar la muralla sur de Ostende, encontrándose con una muralla interior nueva que habían construido los sitiados.
La situación ya era desesperada para la ciudad, y aún así aguantó todo el verano hasta que finalmente fue rendida por el último gobernador, Daniel d’Hertaing.
Tras ello, Ambrosio de Spínola ofreció un banquete al gobernador y además a los 3.000 supervivientes se les perdonó la vida e incluso se les permitió marchar.
Fue sin duda una victoria pírrica, dados los casi 17.000 muertos sufridos por las tropas españolas, entre ellos unos 250 capitanes y varios maestres de campo y por su parte los rebeldes perdieron a más de 40.000 hombres, incluyendo 15 coroneles y 575 capitanes.
Además la toma de La Esclusa, compensó la pérdida holandesa de Ostende como puerto rebelde en Flandes, aunque sirvió para encumbrar la figura de Ambrosio Spínola como gran estratega militar.
Fuente: https://terciosviejos.blogspot.com/2018/01/sitio-de-ostende.html